Más de una década han tenido que esperar los propietarios del parque del Corredor Verde para recibir los primeros pagos por sus terrenos. No todos están de acuerdo y pueden ejercer su derecho a reclamar una mayor compensación económica por la vía que consideren oportuna, pero la gran mayoría han llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Atarfe, cuyo equipo de gobierno -hay que decirlo- se empeñó en saldar una deuda -otra más- de algo más de dos millones de euros que heredamos por la nefasta gestión de los gobiernos socialistas.
Todavía recordamos el día en que Víctor Sánchez inauguró en noviembre de 2007 el mayor parque público de Atarfe con la presencia de una banda de tunos y la entonces consejera de Justicia, María José López. Y lo hizo sin cumplir con los convenios urbanísticos que firmó con los propietarios de los terrenos y sin pagar las certificaciones de obras a la entonces empresa pública de la Diputación de Granada, Ingra, actualmente Visogsa. Ni pagó por el suelo que ocupó ni abonó a la institución provincial el dinero de la obra, casi cuatro millones de euros.
El gobierno de Por Atarfe Sí (PASI) ha considerado prioritario resarcir el daño a los 15 vecinos y pequeños propietarios de terrenos que se vieron afectados, una deuda que el Ayuntamiento irá abonando en plazos por la delicada situación económica de las arcas municipales. Hemos contado con el apoyo de toda la oposición pero no han faltado reticencias. Nos llegaron a acusar de engañar y utilizar las desgracias de los vecinos porque quisimos saldar la deuda con el plan de saneamiento financiero que permitía aplazar por un periodo de tres años la contraída con los bancos para solventar otros compromisos de pago; un plan que, por cierto, nos tumbó la oposición en dos ocasiones.
Pese a los contratiempos, nuestro compromiso ha sido claro desde el primer momento y no nos podrán acusar de escurrir el bulto como hicieron los anteriores gobiernos socialistas. Queríamos que los vecinos estuviesen en la lista de salida de los pagos de la deuda y así ha sido. Ahora toca también abonar los 3,9 millones de euros a la Diputación por el acondicionamiento del parque del Corredor Verde a través de los fondos de ordenación que aprobamos en el último pleno extraordinario gracias a los concejales de Ganemos y al apoyo de Trinidad Rodríguez, la única concejal socialista que defiende el interés general por encima de estrategias políticas partidistas que solo persiguen bloquear la acción de gobierno. Del episodio ocurrido tras el pleno ya hablamos en la anterior entrada. Ellos mismos se ponen en ridículo.